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25 de julio de 2012

A cerca de 80 días de haberse renovado los órganos de decisión en la Defensoría de los Derechos Humanos del Pueblo de Oaxaca (DDHPO) resulta fundamental que, a la brevedad, este organismo presente un Informe de Situación a la ciudadanía, que describa los pormenores de su organización y los detalles de un programa de trabajo coherente y a la altura de las exigencias de nuestro tiempo.

La referencia es pertinente pues este mismo día 25 de julio, su titular Arturo Peimbert Calvo, compareció ante el Congreso del Estado y respondió algunos cuestionamientos de los Legisladores.

Sin embargo, las preguntas no sólo surgen del órgano legislativo, sino que son cada vez más recurrentes y generales. Tienen que ver con situaciones básicas de carácter institucional y de compromiso con la transparencia,  pues la ciudadanía está muy al tanto de que sea la propia Defensoría la que transparente sus procesos y cumpla fielmente con la Ley.

Por ejemplo, el artículo 13 de la Ley que la organiza, establece que la DDHPO debe «XIII. Elaborar informes generales y específicos sobre la situación de los derechos humanos en el Estado, emitiendo las recomendaciones, propuestas y medidas necesarias para garantizar de manera plena el respeto a los derechos humanos».

En este sentido, es válida la exigencia de que se publique un Informe de Situación, certero, sobre la situación actual de dicha instancia, a casi 80 días de haberse renovado, como decíamos, sus órganos de dirección. Además, que se otorgue Máxima Publicidad a su Programa Anual de actividades que, de acuerdo al artículo 25 de la misma Ley, el Titular debe: «VII. Someter a consulta del Consejo Ciudadano…».

Con la presentación y máxima publicidad, como decíamos, de ambos documentos, la DDHPO estaría dando un paso adelante muy importante para su paulatina legitimación.

 

 

 

 

 

 

Foto: Oaxacanundua