Por: Vicente López Portillo Covarrubias
Twitter @vicentelpc
¿En los últimos días has consultado el saldo de tu cuenta por internet, comprado por teléfono boletos para el cine o pagado la cuenta en un restaurante con tu tarjeta de crédito?
Ten cuidado, los ladrones de identidad aprovechan esta información para cometer fraudes con tu nombre e información financiera.
El robo de identidad se presenta cuando un tercero roba tu información personal y suplanta tu identidad. Cuando esto sucede, no sólo pierdes tu dinero, también se podría ver afectado tu historial crediticio.
Una de las formas en que operan estos delincuentes es por medio del phishing, que consiste en contactarte mediante correos electrónicos supuestamente enviados por instituciones financieras, comerciales e incluso gubernamentales, que al dar click en los vínculos que contienen, te llevan a páginas falsas que usan logotipos e imágenes sin autorización y confunden a los usuarios para que proporcionen datos de sus cuentas.
Algunos ganchos que utilizan para engañarte e invitarte a compartir tu información es que clonaron tu tarjeta, que obtuviste un premio, que estás siendo investigando por irregularidades, que tu cuenta ha sido congelada o que tu tarjeta de crédito ha sido cancelada.
Para evitar ser víctima del robo de identidad, te recomiendo verificar detalladamente el remitente y perfil de los correos electrónicos que recibas. Siempre desconfía, ya que ninguna institución financiera o entidad de Gobierno solicita datos personales por vía electrónica. Instala y actualiza en tu computadora paquetes de seguridad que te protejan contra virus y amenazas.
Los Bancos también cuentan con servicios de alertas que te notifican cuando una persona hace un cargo a tu cuenta. Los puedes contratar en el portal de tu banco, por teléfono o en una sucursal. Con ellos, las instituciones financieras tienen la obligación de notificarte por celular o correo electrónico sobre las operaciones que realices a través de banca por internet, cajeros automáticos o terminales punto de venta.
Si detectas que tu identidad ha sido robada o que se ha hecho mal uso de tus datos financieros, denúncialo ante el Ministerio Público y ante tu Banco.
Recuerda estar siempre alerta.
