Críticas a Roma de Alfonso Cuarón
(www.eloriente.net, México, 15 de diciembre de 2018, por Luis Alberto Osorio Ochoa).- Con toda la expectativa que ha generado el estreno de Roma en un limitado circuito de cines en México, y finalmente lanzado masivamente al mundo a través de Netflix este 14 de diciembre, la crítica internacional ya está descifrando y dedicando varios párrafos al sinnúmero de simbolismos y recursos que hacen de Roma la obra maestra de Alfonso Cuarón.
Enrique Krauze,
en The New York Times, centra su análisis por varios párrafos en la descripción de la colonia protagonista del filme, refresca la historia del lugar y desarrollo social y cultural que da contexto a la historia.
“Se creó en 1903, al sur del viejo centro colonial de la capital, en terrenos desecados del legendario lago de Texcoco. Con sus palacetes art nouveau, sus plazas apacibles y camellones arbolados, era un emblema de la pax augusta que México creía vivir bajo el régimen de Porfirio Díaz.”
Baradwaj Rangan,
crítico de la India, Premio Nacional de Cine al Mejor Crítico de Cine en 2006, compara Roma con Amarcord de Federico Fellini, como películas de memoria.
“El recuerdo memorable de un hombre desnudo que realiza artes marciales; el tramo de la culata donde se apaga un fuego en el bosque mientras gente muy rica bebe champán (y el interior de su enorme casa, donde se montan perros muertos en las paredes), todo es puro Fellini.”
Pedro Ángel Palou,
en El Heraldo de México, centra varios comentarios en la narrativa magistral de Cuarón, en el trabajo de cámara y la exhaustiva recreación de la época.
“Cuarón no teme no cortar las escenas, utiliza largos travelings que nos permiten penetrar en la autenticidad de los personajes, las conversaciones, las fuerzas antagónicas.”
Beatrice Loayza,
como miembro del portal de crítica cinematográfica Next Best Picture, es concreta:
“Lo bueno: Una película completa. Un ejercicio cautivador en forma y una historia emocionalmente poderosa que resonará en cualquier momento. Se basa en las técnicas y preocupaciones del neorrealismo y otros pesos pesados cinematográficos, pero también en gran parte inventivo y único. Una hermosa actuación de Yalitza Aparicio.
Lo malo: puede sentirse emocionalmente distante para algunos, ya que carece de una trama, conflicto o resolución directa.”
Leonardo García Tsao
en La Jornada, reconoce la riqueza visual y auditiva de Roma, sin embargo, lamenta que “siendo adquirida por Netflix, Roma no podrá ser apreciada por la mayoría de los espectadores como acaba de verse en Toronto: en una pantalla grande de cine. Su hermosa fotografía en blanco y negro y 65mm. quedará reducida al tamaño de las pantallas caseras y, peor, las computadoras.»
Sheryl oh
en Film School Rejects, hace un recuento del trabajo de cámara en las películas de Alfonso Cuarón, con y sin Emmanuel Lubesky, y pone en evidencia las características narrativas que proyecta Cuarón como director de fotografía de Roma.
“Aunque se le permitió disparar su última canción por sí mismo, Cuarón preparó a Roma con Lubezki. El primero es muy consciente del estilo, las ideas y las notas de su frecuente colaborador. Sin embargo, también vale la pena señalar que el trabajo de cámara de Cuarón probablemente no se puede separar de sus conexiones profundamente personales con su tema. Lo que resulta es el equilibrio perfecto entre intimidad emocional y un examen cinematográfico más artístico y distante.”
Carli Pierson
en The Independent, hace un análisis de los mensajes de Roma en relación al sistema de castas y la desigualdad social que aún se vive en México.
con esta película, Cuarón no solo ha hecho otra obra maestra, sino que también ha sensibilizado sobre la humanidad de las mujeres que dirigen los hogares de México con tanta precisión y amabilidad, a pesar de las dificultades que enfrentan.
