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Por Lizbeth Liliana Sosa Bautista

Un Sistema de Control Interno es un elemento indispensable para el buen funcionamiento de cualquier organización pública o privada, es por ello, que ha marcado tendencia especialmente en el sector gubernamental, donde el control interno se ha traducido en una necesidad que los entes deben de cumplir para funcionar con transparencia y cumplir con una efectiva rendición de cuentas, sin embargo, esta obligación se cumple con aplazamiento debido a que resulta engorroso y tardío para los municipios y entidades gubernamentales implementarlo. Esto debido entre otras situaciones a la gran cantidad de información que deben procesar, la falta de tiempo para analizarla, la inexistencia de conocimientos y de un experto en temas de control interno, todo se pone de manifiesto en la gran cantidad de observaciones que emiten los órganos fiscalizadores, se hace notorio que el control interno no genera interés en los organismos municipales y gubernamentales, pasa desapercibido para la mayoría de los servidores públicos y los encargados de atender estos temas los perciben como un conjunto de formatos que llenar para cumplir con las obligaciones y solventar las observaciones de los entes revisores.

Es indudable que Gobierno del Estado ha realizado esfuerzos para implementar el Control Interno en cada una de sus dependencias y entidades, la Secretaría de la Contraloría y Transparencia Gubernamental ha puesto en marcha el SICOCOI (Sistema de Información del Comité de Control Interno), además de publicar un Manual de Control Interno para los Entes de la Administración Pública Estatal, basado en el Modelo Estatal del Marco Integrado de Control Interno para la Administración Pública del Poder Ejecutivo del Estado de Oaxaca, así como, formatos y guías relacionados con las funciones del comité de control interno y sus componentes, incluso en los últimos días emitió el cuestionario de Evaluación del Control Interno, sin embargo y pese a estos esfuerzos, las dependencias avanzan lentamente en su implementación; el avance hasta hoy se encuentra anclado en el primer componente de los cinco que integran el Control Interno, hecho que evidencia que es necesario generar interés y cooperación de las entidades.

En los municipios es mucho más evidente el retraso y la falta de coordinación para implementar un buen Sistema de Control Interno, derivado de su escaza infraestructura, recordemos que de acuerdo a la Ley Orgánica Municipal del Estado de Oaxaca, los municipios mayores a 20,000 habitantes están obligados a poseer una Contraloría Interna, sin embargo, si hacemos un conteo existen mas de 38 municipios que sobrepasan este número y la mayoría de ellos no poseen un área que vigile, supervise y evalúe los recursos públicos y sobre todo que establezca controles dentro de las demás áreas, con la finalidad de tener un estricto cuidado en el funcionamiento administrativo del municipio, esta carencia lleva a una situación preocupante y hace evidente la falta de información por parte de los sujetos obligados.

Son varias las razones por las cuales es claramente visible que es necesario contar con documentos que expliquen de manera simplificada el Sistema de Control Interno, que sean de fácil comprensión y que informen sobre las actividades generales que se deben realizar, deben plantearse estrategias con el objetivo de brindar a las entidades públicas las herramientas necesarias para una visión práctica del Sistema de Control Interno, que las ayude a estructurar cada documento y actividad necesaria para tener un sistema eficiente, las capacitaciones son factores claves dentro de este proceso, puesto que tendrían como fin establecer una cultura de control dentro de las entidades, para que cada una sea capaz de diseñar sus documentos normativos y de implementar las actividades necesarias para ponerlos en práctica.

Por último, es necesario precisar que el control interno es un conjunto de actividades repetitivas y permanentes que establecen un proceso dinámico, integrado por 5 componentes: Ambiente de Control, Evaluación de Riesgos, Actividades de Control, Información y Comunicación, Supervisión y Seguimiento; además de 17 principios, donde todos son importantes e influyen en el funcionamiento y la consolidación de otro, cada componente dentro del control interno es un engrane que impulsa a otro para hacer funcionar un sistema, que al final llevará a la organización a cumplir con mayor eficiencia sus objetivos y metas, se debe tener en cuenta que el control interno es el medio de transporte para alcanzar un fin y como tal, todos los integrantes de la organización son participes de él y es fundamental que conozcan y delimiten sus responsabilidades para que la implementación y funcionamiento del sistema sea todo un éxito.

 

Lizbeth Liliana Sosa Bautista

Es Licenciada en Contaduría Pública, Certificada en Fiscalización Pública y Maestra en Evaluación de Políticas públicas con mención Cum Laude.