Crónicas Beisboleras: Los Coaches

(www.eloriente.net, México, 1 de junio de 2015. Por: Jaime Palau Ranz).-

La Pregunta.

¿Qué peloteros han conseguido la mayor cantidad de jonrones en una temporada regular en Grandes Ligas y quien posee actualmente la mejor marca? La respuesta al final de la columna.

Los Coaches.

Cada equipo profesional de béisbol requiere de varios auxiliares para reforzar el trabajo de su entrenador, son las gentes de su confianza y los expertos en cada departamento, se les denomina couches, los hay de bateo, de pitcheo, de fildeo, de primera base y de tercera base, hay conjuntos que su presupuesto les permite tener más de uno en cada especialidad, por ejemplo en bateo, debe haber un experto de cada lado ya que hay que pulir las habilidades tanto de zurdos como de derechos, la persona ideal es alguien familiarizado con el club, serio, que en sus tiempos de jugador activo haya sido muy efectivo con el bate, que tenga buen ojo para analizar el movimiento del swing de cualquier pelotero, que tenga paciencia y facilidad de palabra para explicarle como mejorar en su mecánica, es el responsable en enseñarles a realizar toque de bola, a conectar un globo de sacrificio o a chocar la pelota hacia la banda contraria (esto es que un zurdo batee por la tercera o un derecho por la primera base); lo mismo sucede con los couches de pitcheo, al haber lanzadores zurdos y diestros se requiere un experto de cada brazo para analizar el movimiento y mecánica de cada pitcher, así como espaciar el trabajo en el brazo durante toda la temporada, es bueno tener especialistas en relevos largos o cortos y en velocidad o en curvas y principalmente deben conseguir que los lanzadores del equipo tiren por dentro, lo que quiere decir lanzar sin miedo al espacio que queda entre el home y el cuerpo de los bateadores enemigos, dominar ese espacio sin temor es muchas veces la clave para definir a un pitcher exitoso. Tanto los couches de bateo como de pitcheo deben de grabar cada turno al bate o cada lanzamiento para analizarlo detenidamente al día siguiente y hacer los ajustes con quien no esté teniendo un rendimiento óptimo, así se puede detectar quien falló, en qué momento o que hizo mal.

Los couches enseñan a los peloteros a correr las bases, a barrerse de cabeza o con las piernas por delante, a considerar siempre el marcador y los contrarios que se encuentren en base, para saber dónde ubicarse en el terreno de juego, a donde lanzar la pelota o que almohadilla cubrir para evitar otro avance.

Los couches de primera y tercera bases, salen al terrenos de juego cada entrada al momento en que su equipo debe ir a batear, se ubican en los espacios delimitados por cal a un lado de la inicial y la antesala en territorio de faul, la función del que está en primera es avisarle al bateador que acaba de conectar, si pisa la almohadilla y continua su carrera sobre la raya de cal o se abre para enfilarse hacia la segunda base, si tiene corredor en primera le avisa si abre más o si el lanzador contrario va a revirar para que retorne de inmediato, si el tiro es malo y suelta la bola el inicialista, evalúa si puede conseguir la segunda y lo manda de inmediato, en el caso del coach de tercera la responsabilidad es mucho mayor, debe saber de estrategias y estar siempre atento a cada situación para ordenar la ofensiva jugada a jugada, mediante señales ordena a los bateadores si deben aguantar un lanzamiento, realizar un toque de bola y hacia que banda, si debe tirarle a lo que venga sea bueno o malo y hacia dónde dirigirla, a los corredores les ordena si deben salir a la siguiente almohadilla tras algún lanzamiento, ya sea en robo o en jugada de hit and run, también debe analizar si un corredor que va a cruzar por la tercera puede alcanzar el home para mandarlo o mejor lo detiene y evitar un out seguro, es el cerebro de la ofensiva y por lo tanto el de mayor confianza del entrenador para que interprete lo que requiere dentro del terreno de juego.

La Respuesta.

Por alguna razón desconocida, casi como una maldición, cada vez que se va a romper un récord de jonrones en Grandes Ligas, los periodistas y los aficionados critican fuertemente al que lo va a conseguir, a la gente no le gusta que caigan de su pedestal los grandes ídolos, hablando de jonrones, la primera gran marca la impuso George Herman “Babe” Ruth en 1920 con 54 cuadrangulares, se volvió el favorito de la afición consiguiendo grandes números y campeonatos con los Yankees de Nueva York, en 1927 rompió su propia marca aumentando la cantidad a 60 palos de vuelta entera, algo impensable, hasta que en 1961 Roger Maris lo sobrepasó con 61, en lugar de celebrar y reconocerlo, se comparaba que Ruth conectó 60 en 154 juegos y Maris 61 con 162 partidos, no se aceptaba como válida la nueva marca, los años dieron cordura reconociéndose finalmente, en 1998 vino el enorme Mark McGwire, jugador de los Cardenales de San Luis, a romper el récord disparando 70 bambinazos, nuevamente se cuestionó el logro señalando el uso de sustancias prohibidas para mejorar el rendimiento, lo cual es cierto y ya fue reconocido, tanto los lanzadores como los bateadores empezaron en los 90´s a usar sustancias prohibidas para estar en igualdad de circunstancias, unos lanzar más duro y otros sacar el bate con mayor velocidad y fuerza, era cuestión de tiempo para ver roto ese récord, y sucedió en el 2001, Barry Bonds, jugador de los Gigantes de San Francisco batió todos los registros con 73 vuelacercas y también fue cuestionado, no solo utilizó sustancias prohibidas sino mintió ante un jurado al declarar bajo protesta que no lo había hecho, los controles antidoping que hoy día son aplicados en Grandes Ligas limita batir récords tan espectaculares, nuevamente pasarán muchos años antes de ver que caiga esa marca, más no lo duden, un día llegará alguien con grandes facultades para conseguirlo y seguramente se convertirá en el nuevo gran ídolo.

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Seguiré comentando la próxima semana.

Imagen: @Liga Mexicana de Beisbol

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