Por Weforum
Solo para 2022, 75 millones de empleos probablemente serán desplazados en 20 economías principales, mientras que 133 millones de empleos nuevos surgirán en industrias que solo están ganando terreno. Al mismo tiempo, se estima que casi dos tercios de los niños que comenzaron la escuela en 2016 tendrán empleos que aún no existen.
Entonces, ¿cómo podemos preparar adecuadamente a la fuerza laboral del mañana al mismo tiempo que capacitamos a los cientos de millones de personas cuyo trabajo está evolucionando?
Aquí hay cuatro formas en que los líderes empresariales pueden comenzar a abordar la brecha de habilidades digitales.
1. Adopte el aprendizaje permanente
Si bien es fácil pensar en las habilidades digitales como las que se enseñan en el conjunto de las TIC en la escuela o la universidad, la alfabetización tecnológica, en el sentido más amplio, es lo que importa.
Para asegurarnos de que nuestra fuerza laboral esté verdaderamente equipada para los trabajos del mañana, necesitamos un desarrollo amplio de estas habilidades, entre clientes, padres, maestros y personas mayores, así como estudiantes y nuevos graduados.
A medida que la tecnología reconstruye nuestro día a día, también abre nuevas formas de impartir estas habilidades. Por ejemplo, la plataforma Skills for Tomorrow de BT ofrece cursos gratuitos en línea o presenciales para todos, desde propietarios de pequeñas empresas hasta maestros y padres.
Y no solo se necesitan fomentar las habilidades digitales. Estudio tras estudio muestra que, si bien la tecnología alterará muchos roles directamente, también tendrá efectos indirectos. A medida que crece la demanda de matemáticas, computación y análisis de datos, también lo hará la necesidad de atributos humanos como la creatividad, el pensamiento crítico, la persuasión y la negociación.
2. Comience temprano
Los empleadores que entienden este cambio general en los requisitos de habilidades están por delante de la manada. Nutrir al personal a largo plazo y equipar a los jóvenes con las herramientas que necesitan para progresar se vuelve más importante en un entorno de trabajo que está en constante cambio. Eso significa que necesitamos culturas fuertes que promuevan la tutoría y el desarrollo de las llamadas habilidades blandas.
Dado que es probable que la mayoría de los roles y trabajos se vuelvan menos definidos y más fluidos, la capacitación y capacitación continua puede garantizar que el personal esté listo para aprovechar las nuevas oportunidades a medida que surjan. También hay un lugar para la tutoría inversa, con graduados recientes capaces de ayudar y apoyar a altos ejecutivos a medida que tienen sentido de las fuerzas que están remodelando sus negocios.
La capacitación en el trabajo podría ser más importante que las rutas tradicionales. Las empresas como Apple, Google e IBM se encuentran entre las muchas que están evitando exigir títulos universitarios para el empleo. En BT, puedes obtener tu título mientras trabajas como aprendiz de ciberseguridad , obteniendo experiencia comercial real, al mismo tiempo que aprendes sobre seguridad, identidad, vulnerabilidad y riesgos en la era digital.
Imagen: Foro Económico Mundial
3. Fomentar la inclusión
Programas como estos pueden ayudar a cerrar otra brecha digital: la brecha de género. Menos mujeres que hombres trabajan directamente en roles de TIC en casi todos los países del mundo. Y un informe de la Comisión Europea encontró que las mujeres están menos interesadas en la educación superior, el empleo o el emprendimiento en el sector digital.
Todos debemos asumir la responsabilidad de desafiar estos estereotipos, promover la educación y abogar por las mujeres empresarias, por lo que esta brecha se cierra en lugar de ampliarse a medida que se desarrolla la Cuarta Revolución Industrial . Aquí, iniciativas relativamente pequeñas pueden hacer una gran diferencia. Code First: Girls ofrece programas de codificación gratuitos de cuatro meses para mujeres de cualquier edad y les da una entrevista de trabajo una vez que hayan completado el curso.
Hay muchas otras iniciativas, todas con el objetivo de alentar el empleo de las mujeres en el mundo digital y asegurar que la revolución lleve a todos los miembros de la sociedad.
4. Unir fuerzas con múltiples partes interesadas
Y si bien cada uno de estos esquemas tiene su mérito individual, hay un reconocimiento creciente de que no se puede cerrar la brecha de habilidades a través de miles de iniciativas gubernamentales y de compañías diferentes. Los socios públicos y privados están despertando a la idea de que trabajar juntos generará soluciones mucho más sostenibles y escalables.
Algunas asociaciones ya están en su lugar. Future.now es una nueva coalición de empresas líderes, incluidos BT y Lloyd’s Banking Group, así como grupos de la sociedad civil, que trabajan en colaboración con el gobierno para impulsar la iniciativa de habilidades digitales del Reino Unido. Busca cerrar la brecha entre la gran cantidad de cursos digitales que se ofrecen y la falta de personas que los toman, ya sea porque no saben por dónde comenzar, carecen de motivación o están confundidos por la variedad de opciones.
En otras partes, más de 200 empresas, incluidas ABB, Facebook, Microsoft, Nestlé, BT y Vodafone, forman la Alianza para TI , que prepara a las personas para el mundo profesional.
Si bien estas iniciativas deben fomentarse y aplaudirse, debemos ir más allá e integrar más.
Eso es porque estamos en la punta del iceberg de brecha de habilidades, y la falta de coincidencia puede ser mucho más amplia de lo que pensamos. Dentro de 20 años, el 90% de todos los trabajos requerirán algunas habilidades digitales. Siempre surgen nuevas necesidades, no solo en ámbitos obvios como la ciberseguridad y el big data, sino también en áreas como la ética, la regulación y la privacidad.
En su nuevo Manifiesto de Davos , el Foro Económico Mundial enfatiza cómo las empresas, los gobiernos y la sociedad civil deben unirse, aprovechando sus competencias centrales en colaboración para mejorar el estado del mundo.
Ahora es un gran momento para evaluar dónde estamos y pedir el fin del aislamiento y el trabajo en silos. Los ejecutivos en todos los niveles, y en todas las industrias, deben aprovechar este momento para consolidar su legado y preguntar: ¿Cómo puede mi organización hacer más? ¿Y con quién podemos unir fuerzas para equipar mejor a nuestros ciudadanos para el lugar de trabajo del mañana?
