Rodrigo Petate y Juan Pablo Vasconcelos.




 

Vía @Rodrigo Petate
Me encontraba en el foro del Palacio de Bellas Artes, terminando el ensayo del Oratorio de Noel que hicimos para Navidad con la compañía de Ópera de Bellas Artes, y al término de este ensayo, me acerque a saludar a nuestro querido Director de la Compañía.

 

Nos saludamos y recibí algunos comentarios sobre dicho ensayo, y al término de esta conversación, me dice: “Querido Rodrigo pues, quiero invitarte a que formes parte de nuestra primera producción del año 2022, y quiero saber si aceptas y si te gustaría”.

 

En ese momento llegaron a mí tantas emociones que inmediatamente acepté y le agradecí infinidad de veces por dicha invitación, le comenté lo que esto significaba para mi. Nos despedimos, me levanté y me fui a mi camerino inmediatamente.

 

En cuanto cerré la puerta, me senté y comencé a llorar! Llorar de alegría, de emoción, de agradecimiento, y solo podía decir: ¡Gracias Dios! Y lloraba porque cada artista sabe y sabemos todo el trabajo, empeño, dedicación, disciplina, amor y sacrificio que le ponemos a nuestra carrera, sabemos cuánto nos cuesta cada paso y cada escalón que subimos y cuando suceden momentos como éste, te das cuenta que todo vale la pena.

 

¡Ese día fui inmensamente feliz! Y se los comparto porque sé que a veces el camino se vuelve turbio, pero cada día que se levantan y eligen luchar por avanzar en vez de rendirse, es un día que están más cerca de sus sueños y objetivos.

 

Y bueno, pues con este Post les anuncio oficialmente, que empezamos con el pie derecho este año y con esta fantástica noticia e invitación para volver a mi amado Palacio de Bellas Artes, en esta Ópera que si la pandemia nos permite, se estrenará muy pronto.
@Rodrigo Petate


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