#CCCO: Era Obvio, por Alejandro Cruz Pimentel

(www.eloriente.net, México, 22 de octubre de 2015. por: Alejandro Cruz Pimentel @acruzpi).- El desistimiento de construir el Centro de Convenciones en el Cerro del Fortín, por parte del gobernador, desde mi particular punto de vista, era obvio. Las presiones que tenía la obra eran variadas: administrativas, ecológicas, ambientales, estructurales, paisajistas, culturales, legales, por citarlas. El Maestro Francisco Toledo, PRO-OAX, Frente en Defensa del Cerro del fortín, asociaciones de profesionistas, artistas y otras asociaciones siempre fueron incisivos en señalar al gobierno en turno, punto por punto y con distintos especialistas en cada uno de los temas, los daños y las irregularidades de esta obra.

Nos tacharon de oponernos al desarrollo de Oaxaca.

Casi un año de litigio constante, casi un año de señalamientos, casi un año de buscar un diálogo abierto, casi un año de incertidumbre en este gobierno, casi un año sin escuchar a los ciudadanos. Queda claro que la sociedad informada pudo contener el abuso del poder, pudo contener a un elemento del Estado que trató de abusar de los otros dos: el pueblo y el territorio. La lucha fue siempre con la razón, siempre mostrando documentos, siempre exponiendo argumentos, siempre por la vía legal.

El acceso a la información, derecho consagrado en la Constitución, socavó los cimientos de este proyecto, cimientos que se encontraban endebles y que carecían de un núcleo duro. Desde el mes de febrero se inicio la ruta crítica del acceso a la información de esta obra, información que a la fecha no está disponible para la ciudadanía de a pie. Información que ha sido sacada con tirabuzón, información que dio pauta a seguir indagando y preguntando más sobre el proyecto. La batalla Kantiana que se dio, aún sigue, no termina. Sostengo, que la falta de transparencia en esta obra acabó por ponerla en la balanza política del gobierno.

 

Era insostenible construir la obra, desde hace un año se señaló que lo que se vislumbraba, era una obra más de las catalogadas como “elefantes blancos”. El FIDELO, organismo en quién recayó la construcción, carece de legalidad para construir obra pública fuera de su patrimonio fideicomitido, aunado a que no tiene capacidad técnica mucho menos profesional para construir una obra de esta envergadura, de esta complejidad, de este tamaño. Los actos del procedimiento de la licitación me lo confirmaron; en la junta de aclaraciones existieron “precisiones a modo” de la convocante para el contratista TRENA SA DE CV.; precisiones para poder realizar una evaluación real de las propuestas; precisiones porque la información de los planos no podía ser vista; precisiones y más precisiones. Hoy ha sido cancelada la licitación, el sustento legal dice: “… ya que de continuar con el procedimiento se pudiera ocasionar un daño o perjuicio a esta entidad…”. Dicho en otras palabras, serían más los daños que los beneficios.

El pronunciamiento del C. Gobernador llega tarde, pero no por eso, es de reconocerle la decisión tomada. Claro está, que no puede tomarse como un acto de vocación democrática, no puede hablarse de sensibilidad, no puede hablarse de que no hay autoritarismo, no puede hablarse de que se toma en cuenta a todos los sectores de la sociedad. Aún estamos lejos.

La decisión tomada pasa por la renuncia del Secretario de Turismo, su conflicto de interés simulado por su habilidad de comunicación cercana con él, lo puso en el despeñadero de su gestión.

Celebro que el acceso a la información se convierta en la punta de lanza para “abrir” a la luz de todos, las decisiones que tomen nuestros gobernantes. Sí se puede ponerlos en vilo, sí se puede que expliquen sus decisiones, sí se puede que cambien de decisión. Hoy en su comunicado el gobernador pide transparencia y total apego a la normatividad.

Lamento el comportamiento de la CMIC que se prestó a acciones contrarias a sus fines, “no quisieron” participar en esta obra. De “dientes para afuera” piden obra para los constructores oaxaqueños. Lamento que el presidente haya sido profesor del Instituto Tecnológico de Oaxaca y no honre el nombre de nuestro Tecnológico.

Celebro también la inclusión de la Secretaría de la Infraestructuras (SINFRA) en este nuevo proyecto, al igual que la Secretaría de la Contraloría para que deje ser de ser un convidado de piedra y de seguimiento al proceso jurídico administrativo.

Lamento la actitud cobarde, por decir lo menos, de nuestros representantes populares, sí, aquellos que habitan el recinto de Jalpam. Claro no todos, pero la mayoría se quedaron callados, se quedaron inmóviles a las manifestaciones y señalamientos de los ciudadanos, se hicieron de la “vista gorda” para no molestar al gobernador. El mensaje que nos mandaron, es que todavía no entienden su función constitucional, no entienden la división de Poderes, no entienden que se deben a los ciudadanos. Lamento que varios legisladores y legisladoras hoy sean arribistas y quieran aplaudir la decisión del gobernador, quieran hacernos creer que la transición y su coalición son buenas. Callados se ven mejor.

Hoy podremos hablar de una y mil razones que orillaron al gobernador a tomar esta decisión. Sin embargo, no dudo que ganó el Cerro del Fortín, ganó la ciudad de Oaxaca, ganó la sociedad civil organizada e informada. De los perdedores, el tiempo nos lo dirá.

Queda pendiente el estacionamiento, una obra en proceso que debe detenerse por ser parte integral del proyecto. Los daños causados son irreversibles pero pueden mitigarse. Es preferible un mal arreglo con el contratista que un buen pleito con la ciudadanía. El Frente en Defensa del Fortín sigue firme con las acciones legales contra la obra. El avance actual permite reconsiderar si sigue o se cancela.

Saludo al Gobernador y celebro el costo político de echarse para atrás. Era preferible gobernador, sacúdase de los malos servidores públicos que lo pusieron en el despeñadero.

¡SÍ al centro de convenciones, NO en el cerro del fortín! Siempre lo dijimos.

FOTO: ARCHIVO

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