Por: Alfredo Woolrich

Pese a haberse formado en La Masía, el periplo futbolístico de Gerard Piqué no inició en Camp Nou. Los visores del Manchester United, le llevaron a Inglaterra para acabar de pulirlo, con cesión incluida al Real de Zaragoza. Cuatro años después de abandonar al FC Barcelona, las intenciones de recompra no se hicieron esperar, Piqué se había convertido en un central con gran futuro y el regreso a casa supondría una progresión inmejorable para él y para el club.

Se afianzó en la titular blaugrana para mandar al banquillo a Rafael Márquez, esa es la realidad. Desde el 27 de mayo de 2008 en que se hizo oficial su llegada al equipo entonces dirigido por Pep Guardiola, han sido 199 veces las que el nombre de Gerard Piqué ha lucido la casaca culé. Este domingo tiene al Tigre Falcao y al Atlético de Madrid enfrente para festejar su segunda centena de partidos como catalán.

Entre los recuerdos que atesora el barcelonés y que comentó a MD, no pudo excluir aquella victoria en el Santiago Bernabéu ante los odiados rivales por marcador de 2-6. Piqué incluso se dio el lujo de cerrar la cuenta como un consagrado hombre de área. Por el contrario, la derrota de la temporada pasada ante el Osasuna en Pamplona y que prácticamente sentenció la Liga para los catalanes, ocupa un espacio doloroso en la memoria del central.

Al reconocer al mejor portero al cual se había enfrentado, no dudó en mencionar a Andrés Palop del Sevilla ni a Maicon del Inter de Milán como mejor defensa. Enfrentó al brasileño en las semifinales de la Champions League, cuando el cuadro italiano dirigido por Mourinho dejó fuera de la pelea a los blaugranas.

Adelantando la línea se refirió a los mediocampistas y particularmente a su gran amigo Cesc Fábregas. Cuando este militaba en el Arsenal, se enfrentaron en un par de ocasiones, ambas con resultado favorable para los españoles. Finalmente en la demarcación ofensiva, elogió a Cristiano Ronaldo, con quien coincidió en el Manchester United y al que ha enfrentado ya varias veces en los clásicos. En las ediciones recientes, el portugués se ha impuesto al español, marcando goles decisivos para la causa blanca.

Con un apego especial al Athletic Club y al estadio San Mamés, Piqué reconoce a esta afición como la más entregada y con más fair play. Igualmente opinando sobre Iturralde González como el mejor árbitro que conoce y a Sir Alex Ferguson como el mejor técnico rival y a quien ya sirvió durante su paso por el club inglés.

Estos son los temas que Piqué abordó en la víspera de cumplir 200 partidos como jugador del FC Barcelona. Considerado como uno de los mejores defensas centrales del mundo y habiendo ganado todo como futbolista a sus 25 años, la afición catalana debe estar tranquila, pues Gerard sigue en franco ascenso y promete ser un hombre de garantías y resultados por muchas temporadas más.

Foto: @Gerard Piqué