eloriente.net/ Fundación Alfredo Harp Helú Oaxaca

27 de mayo de 2013

Fue presentado un fragmento, hasta ahora perdido, del Códice de Yanhuitlán, en la Capilla del Rosario ubicada dentro del Exconvento de San Pablo. Este documento pictográfico que data del siglo XVI plasma en sus hojas las décadas posteriores a la conquista.

El rescate

Hace seis años, por azares del destino, el Dr. Sebastián van Doesburg y el Mtro. Michael Swanton se enteraron que un fragmento del códice se encontraba en la capital del país, en manos de particulares que deseaban venderlo. Tras años de negociaciones, el Mtro. Francisco Toledo, la Dra. María Isabel Grañén Porrúa, el Dr. Manuel Herman, el Dr. Michael Oudijk, Salvador Flores  y la Dra. Ángeles Romero Frizzi, adquirieron el documento.

De acuerdo con la Dra. María Isabel Grañén Porrúa, presidenta de la Fundación Alfredo Harp Helú Oaxaca (FAHHO), la compra de este documento no es a título personal, el propósito fue que el códice regresara al estado, y ahora, el objetivo es restaurarlo para que pueda ser conocido por el público ya sea en exposiciones o con reproducciones.

El documento

Elaborado por manos índígenas, el documento data alrededor del año 1550. Los expertos indican que es una joya, pues combina la técnica local con la europea. Contiene principalmente pinturas con anotaciones en mixteco escritas con caracteres latinos, además de glifos calendáricos mixtecos.

El códice da testimonio de escenas de conflicto, de encuentros entre nobles mixtecos y los frailes dominicos o los encomenderos españoles. Algunos de los personajes que han sido identificados en el códice son: Francisco de las Casas, encomendero de Yanhuitlán en 1550 y Gabriel de Guzmán, cacique del pueblo desde 1558.

La historia indica que Don Agustín Carlos Pimentel y Guzmán tuvo en su poder el códice y fue quien lo dividió en tres, esto en el año 1717. Actualmente uno de los fragmentos –12 hojas– está resguardado en la Biblioteca Histórica José María Lafragua de la Benemérita Universidad Autónoma de Puebla (BUAP), otro –4 hojas– en el Archivo General de la Nación (AGN), y el último, que hasta hace seis años se creía  perdido, hoy se encuentra en Oaxaca.