Por: Asier García Plaza*

Desde la aparición de los primeros smartphones, la fotografía móvil ha sufrido una evolución inimaginable. Asimismo, la aparición de aplicaciones para facilitar este tipo de actividades combinadas con la posibilidad de compartirlas y así organizar una comunidad ha llamado mucho la atención del público. De hecho, es imprescindible mencionar la importancia que tiene Instagram. Facebook se dio cuenta de ello en su momento y adquirió la compañía por 1000 millones de dólares. Ahora, gracias aVine se están poniendo de moda los vídeos cortos pero, ¿tendrán el mismo éxito que la fotografía móvil?

Instagram

Antes, las imágenes que tomábamos con los móviles eran mucho más casuales y tan solo servían paracapturar puras anécdotas. Actualmente, gracias a la calidad de los sensores y de las ópticas, las instantáneas son mucho mejores llegando incluso a sustituir a las compactas más básicas en condiciones de buena luz. Sí, en entornos oscuros el ruido que generan los sensores sigue siendo demasiado acentuado.

Bien, una cosa es que tengamos la herramienta necesaria para tomar fotos decentes y otra bien distinta es que lo hagamos. Muchas veces disponemos de las capacidades técnicas pero no las exprimimos al máximo para desarrollar todo su potencial. Como he dicho anteriormente, la proliferación de redes sociales ha facilitado y ha impulsado a mucha gente a sacar a la luz su lado más creativo.

De la misma forma, hemos empezado a fotografiar las cosas más banales de nuestro alrededor debido a la gran sencillez que existe para hacerlo. Antaño, las fotos, debido a su gran costo, se hacían a las cosas más importantes y no tanto a pies en la arena. Ojo, esto no significa que la calidad artística sea despreciable. Además, no podemos echar la culpa a la herramienta sino más bien a la gente a la que seguimos.

De la misma forma, todas estas instantáneas que tomamos a lo largo del día se convertirán en recuerdos de sensaciones. Existen tanto amantes como detractores de este tipo de fotografía. Normal, nunca llueve a gusto de todos. No obstante, hay que tener en cuenta que Instagram recoge más de 40 millones de fotografías cada día. Sí, es un éxito rotundo.

Por el lado del vídeo, las cosas todavía están muy verdes. ¿Logrará algún día cosechar el mismo éxito que ha logrado la fotografía móvil? Hace unos pocos meses, se lanzó Vine para iOS y hace dos días apareció en Android. La historia se repite. Lo mismo pasó con Instagram. ¿Será la nueva revolución del vídeo? Ahora que está disponible en las dos plataformas más utilizadas, el número de usuarios potenciales es gigante.

Desde sus inicios, hemos visto unas producciones espectaculares cargadas de imaginación así como también los vídeos más insignificantes. Personalmente, creo que dominar la técnica del vídeo es mucho más difícil que la de una fotografía. Ojo, no digo que las buenas fotos sean sencillas de hacer, sólo que en la grabación de vídeo existen más factores que hay que tener en cuenta.

De la misma forma, crear un vídeo que llame la atención es más complicado. Además, hoy en día, debido a todo el bombardeo de información que recibimos, el tiempo que dedica la gente a visualizar una fotografía es mínimo. No obstante, un vídeo requiere la atención durante unos pocos segundos más. Esto es un gran punto en contra que juega a favor de la fotografía. Cabe añadir que para desechar una imagen porque es mala basta con dedicarle una milésima de segundo y pasar a la siguiente. Sin embargo, para valorar si un vídeo es bueno o no se requieren unos pocos segundos, al menos. Teniendo en cuenta que duran seis, antes de poder juzgarlo ya habrá acabado.

* Licencia Creative Commons Reconocimiento 2.5