eloriente.net
18/julio/2014
Por: Jorge Guerrero
Se le conoce como anatomía sutil a aquello que conforma nuestro cuerpo energético, es decir esa parte de nosotros que esta conformada exclusivamente por energía y que se conoce como aura y chacras.
Estos términos han sido asociados a corrientes místicas y en ocasiones al ocultismo mas sin embargo no hay nada de extraño en ello, por el contrario todos en nuestro organismo contamos con estos cuerpos que científicamente y con métodos sencillos se puede comprobar que existen.
La ciencia la llama bioenergía. Nuestra aura y nuestros chacras aunque no visibles para la mayoría de los seres, no son más que el resultado de los flujos de corriente eléctrica en nuestro cuerpo. Así como lo son las auroras boreales para nuestro planeta tierra, el aura es nuestro campo electromagnético.
Tenemos un aura que es como un filtro o caparazón de protección de nuestro cuerpo, a través de ella integramos luz y codificamos energías ajenas a nuestro sistema. Su color puede ser muy diverso, además de cambiante y dependerá en primer instancia de nuestro estado de salud y de la predominancia de nuestro ciclaje o forma de sentir, pensar e interactuar.
Ya a determinada edad cuando se es más estable, nuestra aura igualmente lo será.
Respecto a nuestros chacras, se habla de siete de ellos principalmente, aunque en realidad tenemos muchísimos más. Los principales están dispuestos desde la base de nuestra columna vertebral hasta nuestra coronilla y se corresponden simultáneamente a los colores de el arcoiris y en su vibración sonora a las 7 notas de la escala musical.
La función de los chacras es la regulación de toma de energía espacial , conocida como chi o ki o prana, así mismo también funcionan para nuestra autorregulación, cada chacra se encuentra relacionado con alguna glándula de nuestro organismo, así como con determinados estados psicológicos o de conciencia.
Lo ideal es trabajar conscientemente con todos nuestros chacras o reguladores y así vivir generando y elaborando nuestro propio equilibrio y armonía.
El aura y los chacras son inherentes a todo ser humano y la mejor forma de mantener esta parte de nuestra anatomía de forma saludable es aprendiendo a respirar correctamente y a mantener nuestro cuerpo físico en forma y saludable, con ejercicio y buena nutrición .
Igualmente importante es sanear nuestras emociones y relaciones interpersonales, esto facilitará vivir una vida llena de serenidad y bienestar.
Recuerda que las cosas que tú ves cambian, cuando tú cambias la forma en que ves las cosas.
Foto: anieto2k
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