Uno de los cambios en la política laboral de México de este año es el aumento al salario mínimo en 20 por ciento; alcanzando los 123.22 pesos diarios. Al cierre de 2019, este alcanzaba los 99.23 pesos por jornada laboral, mientras que en 2018 era de 88.14 pesos.
A propósito de ello, retomamos un fragmento del Reporte de Investigación 126. El salario mínimo: un crimen contra el pueblo mexicano. Cae 11.11% el poder adquisitivo durante el sexenio de Peña Nieto, del Centro de Análisis Multidisciplinario de la UNAM, publicado el 23 de diciembre de 2016.
Este análisis permite, entre otras cosas, situar en dimensiones más objetivas la medida en que el aumento de salario mínimo de inicios de 2020 representa para los mexicanos una oportunidad e mejorar sus condiciones de vida en relación al poder adquisitivo actual.
Porque el salario mínimo en México no alcanza ni para comer, es decir, es anticonstitucional
La Canasta Alimenticia Recomendable es una canasta ponderada, de uso y consumo diario, para una familia mexicana de 4 personas (2 adultos, un/a joven y un/a niño/a) en la que se consideraron aspectos nutricionales, de dieta, de tradición y hábitos culturales. Fue definida por el Dr. Abelardo Ávila Curiel del Instituto Nacional de Nutrición Salvador Zubirán. Está conformada por 40 alimentos, su precio no incluye gastos en su preparación. El CAM realiza un seguimiento de su precio desde hace varias décadas. Es importante resaltar que esta canasta alimenticia recomendable no incluye gastos en pago de renta de vivienda, transporte, vestido, calzado, etcétera, es solamente para tener una referencia de lo que cuesta la adquisición de alimentos básicos.
Por otra parte, en la sección VI del artículo 123 de la Constitución de los Estados Unidos Mexicanos se establece que “Los salarios mínimos generales deberán ser suficientes para satisfacer las necesidades normales de un jefe de familia, en el orden material, social y cultural, y para proveer a la educación obligatoria de los hijos.”[2] Sin embargo, para el 16 de octubre de 2016, la Canasta Alimenticia Recomendable tuvo un precio de $218.06 pesos por día mientras que el salario mínimo diario sólo fue de $73.04 pesos. Lo anterior quiere decir que con un salario mínimo sólo se puede comprar el 33.5% de la CAR (ver el Cuadro 1).
Como se puede observar en el cuadro 1, el que el salario no alcance ni para darle de comer a una familia es una situación que no es exclusiva de 2016, ya que la tendencia en la cual el salario mínimo se encuentra por debajo del precio de la CAR lleva ya varias décadas (Ver la gráfica 1).
Gráfica 1
Si con un salario mínimo en 2016 se puede comprar el 33.5% de la CAR, esto no quiere decir que con tres salarios mínimos se pueda hacer cumplir la Constitución, ya que con esos 3 salarios mínimos sólo se podrían adquirir los alimentos, y faltarían el resto de necesidades normales de un jefe de familia en el orden material, social y cultural y para la educación obligatoria de los hijos. De los 52 millones de personas que son el total de la Población Ocupada en México, al menos el 69.3%, es decir, 36 millones de personas tienen ingresos menores a lo que la Constitución señala que debería ser el salario mínimo (Ver la gráfica 2). Es un crimen que se comete contra millones, violando a diario la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos ¡¿Dónde está ahí el estado de derecho?!
Gráfica 2
Al no cumplirse el artículo 123 de la Constitución Política de los Estados Unidos Mexicanos, no sólo se hace una burla a cada uno/a de los/as trabajadores/as mexicanos/as, si no que se gestiona un crimen a su integridad como seres humanos. Es un perjuicio cotidiano en las mesas de las familias trabajadoras.
El estudio completo puede ser consultado en https://cam.economia.unam.mx/