En Europa, cuando países como Francia, España o Bélgica han comenzado una nueva etapa de desconfinamiento, Reino Unido, que ocupa ahora el segundo lugar de mortalidad en la pandemia mundial, ha decidido prolongar su contingencia por lo menos hasta el primero de junio. El primer ministro Boris Johnson advirtió que las tiendas y escuelas deben permanecer cerradas por el momento, pero animó a los británicos a reanudar el trabajo, pero si es posible, a distancia.
Reino Unido tiene ahora un triste récord en la pandemia mundial y es el de ser el segundo país con el mayor número de muertes, 31.800 personas al día de hoy. Y aunque el número de muertes y hospitalizaciones está disminuyendo, la situación sigue siendo preocupante, sobre todo en las residencias de ancianos.
El primer ministro Boris Johnson, él mismo sobreviviente de COVID-19, anunció el domingo 10 de mayo que las restricciones impuestas desde el 23 de marzo tendrán que permanecer en vigor al menos hasta el primero de junio: “Aunque se han hecho progresos en el cumplimiento de algunas de las condiciones que fijé, no todas se han cumplido completamente, así que éste no es el momento para dar fin al confinamiento”, declaró en un mensaje por televisión.
Johnson presentó un plan de desconfinamiento gradual con la esperanza de reabrir gradualmente las tiendas y las escuelas primarias, comenzando con las clases de jardín de infancia y de primaria a principios de junio.
El dirigente también espera que los estudiantes de secundaria que se presenten a los exámenes el próximo año «tengan al menos algo de tiempo con sus profesores antes de las vacaciones de verano». Los otros estudiantes no podrán reanudar hasta septiembre.
A principios de julio, «si se cumplen todas las condiciones», el gobierno espera «reabrir al menos algunos» de los cafés y restaurantes y otros lugares públicos.
Por otra parte, se impondrá una cuarentena para las personas que entren en el Reino Unido por avión, salvo algunas excepciones como las personas provenientes de Francia y al parecer, de Irlanda. Esta medida preocupa a la industria aeronáutica, especialmente golpeada por la pandemia.
Y si bien se recomienda el teletrabajo, el primer ministro animó a quienes no pueden laborar desde casa, que vayan a trabajar a partir de este lunes, evitando tomar el transporte público y respetando las distancias.
El líder del Partido Laborista Keir Starmer criticó la falta de “claridad” de Johnson. “La declaración del Primer Ministro plantea más preguntas de las que responde”, tuiteó Starmer.
Un pequeño consuelo dentro de esta prolongación, a partir del miércoles 13 de mayo, los ingleses pueden salir tanto como quieran para hacer deporte y tomar el sol, pero sólo con los miembros de su hogar.
