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Por: RFI

La coalición de izquierdas que gobierna en España aprobó este viernes la creación de un ingreso mínimo vital para luchar contra la pobreza. Un mecanismo que garantiza una renta que va de los 462 euros al mes para una persona hasta los 1.015 para una familia. Esta renta mínima vital concierne también a los extranjeros que acrediten su residencia en España desde al menos un año.

La aprobación de esta renta era una promesa del gobierno formado por socialistas y Podemos y que ahora ha acelerado su implementación por la crisis económica provocada por la pandemia del nuevo coronavirus.



El objetivo es luchar contra la pobreza que afecta en España al 13% de los trabajadores y la pobreza severa al 12,4%. El relator especial de la ONU sobre la Extrema Pobreza, Philip Alston, había alertado tras una misión que España le estaba “fallando completamente a las personas que viven en la pobreza, cuya situación se encuentra entre las peores de la UE”.

La situación se ha visto agravada por las consecuencias económicas de la pandemia que ha dejado sin empleo a miles de trabajadores y ha abocado a muchas familias a tener que pedir comida en asociaciones o parroquias.

El presupuesto que se dedicará es de 3.000 millones de euros anuales y se calcula que unas 850.000 familias podrán beneficiarse de la medida. Se calcula que la mitad de estos hogares viven sólo con 310 euros al mes.
Para calcular la ayuda, el Instituto Nacional de la Seguridad Social establece, según la renta del año anterior y la composición familiar, el nivel de ingreso mínimo vital y lo garantiza completando los ingresos. Por ejemplo si una familia tiene unos ingresos de 650 euros mensuales y le corresponden 1.015, el Estado le abona la diferencia.



“Es un paso en la buena dirección”, asegura a RFI Carlos Marín, director del gabinete económico del sindicato Comisiones Obreras. Sin embargo el economista ve dos problemas principales a este ingreso mínimo vital. Según el sindicato, la medida está infra financiada y su cálculo desfasado ya que para establecer el monto se tiene en cuenta la renta del 2019.

“Muchas personas el año pasado tenían una situación razonable pero en 2020 como consecuencia de la crisis sanitaria, social y económica que se ha desencadenado ahora están en una situación de necesidad que no va a venir a atender esta renta”, lamenta Martín y añade que desde los sindicatos habían pedido “una renta de emergencia”.

Pueden beneficiarse de la medida todas las personas, incluidas las extranjeras que residan legalmente en España desde hace al menos un año. El ingreso mínimo vital se empezará a poner en marcha en junio.