Las y los hacedores de la danza en México podrán postularse al XXXIV Premio Nacional de Danza Contemporánea José Limón, considerado la máxima presea que se otorga a quienes se han entregado con profesionalismo al arte en movimiento.

Es una distinción creada en 1988 con el propósito de exaltar el trabajo de quienes se han dedicado a la danza contemporánea nacional, la cual es otorgada por la Secretaría de Cultura del Gobierno de México, a través del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBAL) y la Coordinación Nacional de Danza, en colaboración con el Gobierno del estado de Sinaloa y el Instituto Sinaloense de Cultura.

Por esta ocasión el Premio Nacional de Danza Contemporánea José Limón se llevará a cabo de manera virtual debido a la contingencia sanitaria por la COVID-19.

Pueden participar bailarines y bailarinas de la danza contemporánea, nacionales o extranjeras, con un mínimo de 25 años de ejercicio profesional, quienes deberán demostrar que son personas activas y han sido pioneras en promover y consolidar su labor artística o han sido fundadoras de instituciones en favor de este arte.

En el caso de ser de origen extranjero, deberán comprobar una actividad ininterrumpida en los últimos 10 años en México.

La postulación de candidatos podrá ser a través de una asociación, institución o colectivo artístico o de manera personal, quienes deberán entregar la documentación requerida en la convocatoria.



Plazos para participar

El plazo para participar es hasta el 25 de julio, a las 13:00 horas, fecha cuando cierra la convocatoria. Las propuestas serán evaluadas por un jurado integrado por personalidades elegidas por el INBAL y el Instituto Sinaloense de Cultura. Su fallo será inapelable.

Se entregará premio único por 80,000.00 (ochenta mil pesos) y el ganador o ganadora será notificada vía telefónica a más tardar el 8 de agosto del presente año. La ceremonia de premiación se realizará en línea el 16 de agosto, en la que se dará a conocer el nombre de la persona galardonada.

Para mayores informes, las personas pueden consultar las bases en la plataforma de la Secretaría de Cultura (contigoenladistancia.cultura.gob.mx), en los sitios web del Instituto (https://inba.gob.mx/multimedia/convocatorias/2021/690-convocatoria_joselimon_1.pdf) y en www.culturasinaloa.gob.mx (convocatorias/convocatorias externas).

Cabe destacar que el Premio Nacional de Danza Contemporánea José Limón lleva el nombre de quien es considerado un pilar de la danza moderna. Si bien José Limón (1908-1972) fue un creador mexicano, su trabajo es reconocido a nivel internacional, sobre todo en Estados Unidos, donde compartió su experiencia como formador de nuevas generaciones de bailarines.

Algunas de las figuras que han sido merecedoras de este premio son: Guillermina Bravo, Raúl Flores Canelo, Lila López, Xavier Francis, Guillermo Arriaga, Cora Flores, Federico Castro, Rossana Filomarino, Isabel Beteta, Lidya Romero, Alberto Dallal, Jorge Domínguez, Cecilia Lugo, Marco Antonio Silva, Margarita Tortajada, Anadel Lynton, Miguel Mancillas, Rosario Manzanos, Adriana Castaños, Cecilia Appleton y Ruby Gámez, quien lo recibió el año pasado.

(Secretaría de Cultura de México)



José Limón

Figura clave en la historia de la danza contemporánea, iniciador de técnicas coreográficas que hoy siguen vigentes, primer bailarín en dar un lugar importante al rol masculino, muchas de sus coreografías fueron inspiradas por sus raíces mexicanas, creando así un mestizaje dancístico.

José Arcadio Limón, bailarín, maestro y coreógrafo, nació en Culiacán, Sinaloa el 12 de enero de 1908 y murió en Estados Unidos el 2 de diciembre de 1972. Mexicano-estadounidense que llegó a los 10 años a los Estados Unidos cuando, en 1918, su familia decidió emigrar por motivos derivados de la Revolución, descubrió su vocación por la danza en Nueva York, una vez terminada la preparatoria y sus estudios de arte.

Cuando se le cuestionó acerca de su acercamiento a la danza, Limón recordaría una presentación de los bailarines Harald Kreutzberg e Ivonne Georgia, la primera función dancística a la que asistió, sobre la que comentó: «lo que presencié simple e irrevocablemente me cambió la vida. Vi la danza como una visión de poder inefable. Un hombre puede, con dignidad y torrencial majestuosidad, bailar. Bailar como las visiones de Michelangelo y como baila la música de Bach«.

Su relación con la danza comenzó tarde, a los 20 años, cuando vio el primer espectáculo y comprendió que ahí estaba su futuro. Se matriculó entonces en el estudio de Humphrey Widman y a pesar de las dificultades que se encontró porque tenía endurecidos los músculos de las piernas debido a su faceta de corredor, José Limón no tardó en demostrar grandes aptitudes para la danza y unos meses después debutaba como bailarín en el musical Americana.

Bailarín solista de la compañía de Humphrey Widman durante muchos años, donde realizó sus primeros trabajos como coreógrafo (Por ejemplo: Etude in D Minor,1930 y Danzas Mexicanas, 1939), fue al frente de su propia compañía la Limón Dance Company (1946), la primera en hacer gira en Europa, que inició su brillo. Limón Dance Company llegó para insertarse en la historia de la danza contemporánea de Estados Unidos como la expresión más clara de la mezcla de culturas.

En la Compañía, a la fecha en activo, sentó las bases de un personal estilo y técnica propia que hoy se sigue estudiando, ahí se comenzó a ver la luz de algunos de sus trabajos más conocidos. The moor´s pavane (1949) y The Unsung (1970), continúan vigentes actualmente en el repertorio de Limón Dance Company.

En la actualidad la compañía se encuentra bajo la dirección artística de Carla Maxwell, quien asegura que sin José Limón la danza actual no sería la misma: “Brindó una visión diferente de lo que tenía que ser un hombre bailarín: hacía un retrato de un hombre completo que es capaz de proteger a una mujer, pero al mismo tiempo con la gracia y sensibilidad para danzar en el escenario”.

Se le atribuyen cerca de cien coreografías y para muchas de éstas se inspiró en sus raíces mexicanas y se mostró interesado, con asiduidad, por mostrar al público estadounidense significados y matices de la cultura latinoamericana, como Ritmo jondo (1953) y Carlota (1972), obra que creó para la actual directora de la Limón Dance Company, Carla Maxwell, al frente de la agrupación desde 1978.

A 47 años de su muerte (Nueva York, 1972), su impronta sigue vigente dentro y fuera de su Compañía.

Más videos en las redes de El Oriente: