eloriente.net
10/noviembre/2014
Por Jaime Palau Ranz
Ya va a hacer un año que se celebró la primera edición en la historia del Charity, fue en la ciudad de Culiacán, Sinaloa, la iniciativa fue de Luis Ignacio “el Chicote” Ayala, la finalidad fue apoyar al estado de Sinaloa por las terribles inundaciones que azotaron el Estado, ahora se sabe que también apoyaron al DIF estatal y algunas otras instituciones de beneficencia a las que nunca les sobra el dinero.
No hay plazo que no se cumpla y llego el momento de realizar el segundo Charity, como recordarán la sede del 2014 se le otorgó a Oaxaca a solicitud de Alfredo Harp y la del 2015 a la ciudad de Monterrey a pedimento de Roberto Maiz, propietarios de Diablos y Sultanes respectivamente.
A pesar de que se tuvo un año para planear el evento, aun ayer en la presentación ante la prensa y el coctel de bienvenida, aún faltaban peloteros por confirmar, aun no estaba definido el cuadro de participantes en el homerun derby y a pregunta de la prensa no se pudo confirmar en donde será la sede del 2015, es evidente que el evento como tal aún no ha tomado vuelo y depende de la sede donde se reúnan los presidentes de todos los equipos de la Liga Mexciana de Beisbol de verano con el Presidente de la Liga, es el motivo principal de la reunión y se engalana con el Charity, en algún momento va a volar solo y no va a depender de nadie.
El béisbol es un deporte de conjunto que depende de sus individualidades, cada pelotero pertenece a un equipo y su trabajo va a ser fundamental para obtener los buenos resultados, solo que sus números son personales y exclusivos de sus desempeño, si no está bateando con efectividad, si su defensiva está fallando y comete errores o si es lanzador y no domina a los contrarios, se verán reflejadas sus estadísticas de inmediato, no hay vuelta de hoja, te pueden dar de baja de inmediato del club y nadie va a meter las manos por ti, eso hace que el pelotero se vuelva individualista y piense solo en él y sus beneficios, si a esto lo aunamos que el origen o cuna de la mayoría es humilde, que sus genes fueron dotados de un talento natural y no consecuencia de la escuela o una educación adecuada, entonces sucede lo que vemos en eventos como el Charity de Oaxaca, a pesar del tiempo suficiente de un año de planeación falta unión y solidaridad por parte de muchos peloteros, en esta ocasión solo confirmaron su asistencia 38 ex big leaguers.
Cabe señalar que el listado de mexicanos que han llegado a participar en Grandes Ligas es de 114 hasta la fecha y que han fallecido 13, si quitamos que alrededor de 20 están participando en la Liga Mexicana del Pacífico que acaba de iniciar actividades y no pueden desprenderse de su responsabilidad para acudir al llamado del evento, quedan cerca de ochenta con posibilidades de asistir, también se mencionó que Andrés Mora está delicado y algo de lo recaudado irá para su atención médica y tratamientos, así que no faltará alguno otro de edad avanzada o enfermedad como el caso de Fernando Valenzuela, que no podrían venir, aun así solo la mitad de los disponibles respondió al llamado, lamentable que Vinicio Castilla, siendo el de casa no pudiera cuadrar que su equipo los Rockies de Colorado le permitieran venir y servir de anfitrión, una pena.
El esfuerzo que hace chicote Ayala es muy loable dadas las consideraciones descritas, hay que apoyarlo con todo, por parte de Alfredo Harp Helú no ha quedado, es evidente que es un hombre ordenado, de muy buenas intenciones y que ha hecho un enorme esfuerzo para que sea un éxito, aunque siempre va a depender de los peloteros, de su estado de ánimo y lo poco unidos que son, con el tiempo eso se irá revertiendo ya que las nuevas generaciones que migran al mejor béisbol del mundo tienen otra preparación, las academias de Oaxaca y Monterrey, no solo les perfeccionan sus talentos a los muchachitos de trece a diecinueve años, también los educan y preparan mentalmente para saber cómo tener calma y buen juicio al momento de recibir un cheque millonario y debutar en las Grandes Ligas algunos años después, esa es una grandísima labor que realiza Roberto Mansur Galán y su brazo derecho Roberto Castellón Yuen, esa cultura que reciben les hace comprender que tienen una responsabilidad social, que ellos son los ídolos, los modernos gladiadores, su imagen es seguida como un ejemplo y no pueden actuar de manera irresponsable ni dentro ni fuera del terreno de juego.
Me llamaron la atención varios detalles del evento de bienvenida, me preocupó la salud de Alfredo Harp, lo vi un tanto desmejorado, esperemos solo haya sido un mal momento pasajero y no diabetes o algún problema por el estilo, a pesar de lo delgado que se veía, fue muy amable como siempre, presentando a su hijo Santiago con los grandes jugadores mexicanos de todos los tiempos, también fue notorio el contraste de altura de Teodoro Higuera con los demás lanzadores, es increíble cómo llegó a ser un lanzador tan dominante con tan baja altura, al ver a Esteban Loaiza, Ismael “el rocket” Valdez, Jorge Cantú o Joakim Soria te das cuenta que son otra raza, parecen super hombres de casi dos metros de altura, algo más para comentar fue que Luis Alfonso “el cochito” Cruz, quien ha tenido un papel destacado con su equipo en Japón, fue super amable, notoria su sonrisa, símbolo claro de las nuevas generaciones de big leaguers.
De la junta de presidentes de la Liga no hay mucho que comentar, básicamente la venta de Saraperos de Saltillo con la obligación de mantener al equipo en la plaza y la pugna por que se autoricen a peloteros descendientes de mexicanos y nacidos en los Estados Unidos a que jueguen en Liga Mexicana sin ocupar plaza de extranjero, creo que es de sentido común que sería una locura pues sería cortar de tajo todo el trabajo que se ha hecho por generar jóvenes con talento en las diferentes academias, además que terminaría por encarecer el costo de estos peloteros, es evidente que los equipos que están a favor son los que han cambiado de propietario recientemente y quisieran resultados en el corto plazo o su sede es en la frontera con los Estados Unidos, esperemos se imponga lo más conveniente para nuestro país y se protejan los pocos espacios de empleo que se generan al año para los mexicanos.
El día de hoy, sábado, veremos el home run derby, un partido de softbol y la subasta de prendas y artículos pertenecientes a los grandes ídolos de todos quienes hemos sido fanáticos de este maravilloso deporte, el dinero que se genere nunca será suficiente para cubrir todas las necesidades más en mucho ayudará, de todo corazón deseo que sea un éxito y que crezca hasta convertirse en un evento esperado cada año por todos los aficionados, prensa y los mismos peloteros para acudir al llamado con la solidaridad requerida.
Si desea contactarme favor escribir a jpr.cronicas@gmail.com
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Seguiré comentando la próxima semana.
Foto: Keith Allison – Algunos derechos reservados
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